El 3 de junio de 2015 marcó un hito en la historia de nuestro país. Miles de mujeres y hombres en cada provincia salieron a las calles al grito del NI UNA MENOS luego de que el femicidio de Chiara Páez, la adolescente de 14 años que estaba embarazada y fue encontrada enterrada en el fondo de la casa de su novio, en Rufino, provincia de Santa Fe se transformara en esa gota de sangre que rebalso un vaso lleno de indignación por más de 250 mujeres asesinadas cada año.